- Ketut : El lunes no podré venir a limpiar. Sorry, ceremony!
Ketut es la señora que limpia nuestra casa, pero como Ketut, todos los balineses tienen un montón de ceremonias a lo largo del año, que les impide trabajar. Y claro, luego no tienen vacaciones o trabajan sábados y domingos.
No les importa porque la religión para los balineses es lo más importante de sus vidas, con deciros que dedican muchísimo tiempo y dinero, a las preciosas ceremonias de sus respectivos templos. Estas ceremonias pueden ser en el interior del mismo o fuera de él.
Hemos visto ceremonias en templos pequeñitos, y multitudinarias en caso de que sean por ejemplo las que celebran a la orilla del océano, tanto de día como al atardecer.
Un día fuimos Cristina y yo buscando un templo en el que pudiéramos entrar y a ser posible hacer fotos. Jalan-jalan (andando), vimos un pequeño templo que estaba en plena actividad, aparcamos la moto, nos pusimos los sarong, y una señora muy amable nos dijo que podíamos entrar. Con sumo respeto, uniendo las manos en actitud de orar, entramos y en una gran mesa, había toda clase de ofrendas para sus dioses. Iban preciosamente vestidos para la ocasión, la que más me gusta a mí, todos de blanco, con excepción de alguna niña que iba de color. Fueron sumamente amables, vimos como cogían ofrendas de la mesa grande y las ofrecían en su altar elevado. Algunas ofrendas están hechas artísticamente con frutas, y son increíbles. Pedimos permiso para fotografiarles, y con su típica amabilidad balinesa, no tuvieron inconveniente, aunque era muy divertido ver cómo iban en busca de sus gafas, para salir con ellas en las fotos! Alguno dejaba de sonreír y se ponía muy serio para salir en la foto. Cuando Cristina (fotógrafa de la familia), terminó les enseñó las fotos que había hecho y se mostraron muy satisfechos.
Ketut es la señora que limpia nuestra casa, pero como Ketut, todos los balineses tienen un montón de ceremonias a lo largo del año, que les impide trabajar. Y claro, luego no tienen vacaciones o trabajan sábados y domingos.
No les importa porque la religión para los balineses es lo más importante de sus vidas, con deciros que dedican muchísimo tiempo y dinero, a las preciosas ceremonias de sus respectivos templos. Estas ceremonias pueden ser en el interior del mismo o fuera de él.
Hemos visto ceremonias en templos pequeñitos, y multitudinarias en caso de que sean por ejemplo las que celebran a la orilla del océano, tanto de día como al atardecer.
Un día fuimos Cristina y yo buscando un templo en el que pudiéramos entrar y a ser posible hacer fotos. Jalan-jalan (andando), vimos un pequeño templo que estaba en plena actividad, aparcamos la moto, nos pusimos los sarong, y una señora muy amable nos dijo que podíamos entrar. Con sumo respeto, uniendo las manos en actitud de orar, entramos y en una gran mesa, había toda clase de ofrendas para sus dioses. Iban preciosamente vestidos para la ocasión, la que más me gusta a mí, todos de blanco, con excepción de alguna niña que iba de color. Fueron sumamente amables, vimos como cogían ofrendas de la mesa grande y las ofrecían en su altar elevado. Algunas ofrendas están hechas artísticamente con frutas, y son increíbles. Pedimos permiso para fotografiarles, y con su típica amabilidad balinesa, no tuvieron inconveniente, aunque era muy divertido ver cómo iban en busca de sus gafas, para salir con ellas en las fotos! Alguno dejaba de sonreír y se ponía muy serio para salir en la foto. Cuando Cristina (fotógrafa de la familia), terminó les enseñó las fotos que había hecho y se mostraron muy satisfechos.
Nos despidieron encantados, y al ir a coger la moto... habíamos dejado las llaves dentro del sillín y lo habíamos cerrado! Y ahora qué hacemos? Lo primero que se te ocurre es llamar a Manolo y que venga a buscarnos aunque tengamos que ir en moto los tres a buscar un taller, pero... dónde estamos? Ni idea!
Pero en Bali no hay problema, al ver que no nos íbamos salió un señor salió de su casa y con ayuda de un destornillador intentó abrir el sillín. Inmediatamente al vernos, tres chicos que pasaban en moto, se pararon a ayudar, y con mas maña que fuerza, lo levantaron lo suficiente, para meter una de sus delgadas manos y sacar la llave! Increíble no?... Los balineses son amables y generosos.
Una de las ceremonias más impresionantes es cuando celebran la luna llena. En esta ocasión, se celebra al atardecer y en la playa. Fuimos detrás de los balineses que participaban en la que se iba a celebrar en Pantai Batu Bolong (playa batu bolong). Era impresionante ir en la moto, rodeados de todos ellos vestidos de blanco inmaculado, y detrás del camión que transporta a los intérpretes de su rara música con sus ancestrales instrumentos que van tocando durante el camino.
Pero en Bali no hay problema, al ver que no nos íbamos salió un señor salió de su casa y con ayuda de un destornillador intentó abrir el sillín. Inmediatamente al vernos, tres chicos que pasaban en moto, se pararon a ayudar, y con mas maña que fuerza, lo levantaron lo suficiente, para meter una de sus delgadas manos y sacar la llave! Increíble no?... Los balineses son amables y generosos.
Una de las ceremonias más impresionantes es cuando celebran la luna llena. En esta ocasión, se celebra al atardecer y en la playa. Fuimos detrás de los balineses que participaban en la que se iba a celebrar en Pantai Batu Bolong (playa batu bolong). Era impresionante ir en la moto, rodeados de todos ellos vestidos de blanco inmaculado, y detrás del camión que transporta a los intérpretes de su rara música con sus ancestrales instrumentos que van tocando durante el camino.
Cuando llegan, se sientan todos en la arena, de cara al mar y oran a sus dioses. Luego van llevando sus ofrendas hasta la orilla, cestillos con arroz y flores, preciosos adornos que pesan mucho y llevan las mujeres en sus cabezas, e incluso animales, pollos, patos, que lanzan al mar, pero que los recogen enseguida, no vaya a ser que se los lleve una ola.
Para finalizar, con varios hombres debajo, arman un espeluznante dragón, al que bailando y moviéndolo lo acercan y lo alejan de la orilla, con la música más rápida y más fuerte. Es espectacular, te emocionas viendo tanta pasión.
Para finalizar, con varios hombres debajo, arman un espeluznante dragón, al que bailando y moviéndolo lo acercan y lo alejan de la orilla, con la música más rápida y más fuerte. Es espectacular, te emocionas viendo tanta pasión.
También las ceremonias de día en la playa son impresionantes. Particularmente nos encanta la de Melasti que es dos días antes del fin de año balinés en honor de su dios supremo, señor del mar y de la tierra, y en que purifican los objetos sagrados de cada templo. Maravillosa.
Lo malo es como se queda la playa una vez que la abandonan, porque ponen cientos de ofrendas que se quedan ahí, además de los restos que nadie recoge.
Ayyyy, Bali de mis amores!
Ayyyy, Bali de mis amores!